Cerrado el camino de la amnistía en Diputados crece la interna en el oficialismo ante los reclamos de los detenidos por casos de corrupción

La pelea se está trasladando a los distintos actores del Frente de Todos

La interna oficialista a nivel nacional está que arde, los procesados o condenados por delitos de corrupción están pidiendo a gritos que los saque, casi a punto de decir que si no “van a hablar”. Hasta ahora, Alberto les cerro la posibilidad del indulto presidencial, le paso la pelota a Massa para que el mecanismo sea una amnistía del poder legislativo, pero el otrora opositor hoy devenido en kirchnerista hizo lo que mejor sabe y tiro la pelota afuera.

Así se empezaron a escuchar los enojos de D´Elia, Boudou y De Vido, con el paraguas del Lawfare pidiendo que los saquen de las cárcel por ser “detenidos políticos”, si hasta incluso barajan la posibilidad de crear un tribunal que investigue las arbitrariedades procesales, el cual sería la panacea k porque les permitiría liberarse de cargos y culpas. Pero por ahora eso no prospera, porque la idea del oficialismo es avanzar con una reforma sustancial de la justicia y de esa manera impulsar la agenda de la vicepresidente.

 De hecho, el propio De Vido ya empezó a mandar mensajes mafiosos insinuando que hay “operaciones oscuras” en el gobierno, y poniendo un manto de sospecha que de todos modos ya existe sobre el ejecutivo nacional. A diferencia de los peronistas de pura cepa quienes todavía conservan credibilidad, ya nadie les cree a los kirchneristas, salvo los propios, han perdido el apoyo y la confianza de un sector que los votó en las últimas elecciones, pero que hoy por la errática política nacional y por las malas decisiones que agudizaron la crisis económica, se han alejado, aunque todavía no se avizora para donde irán esos votos.

El kirchnerismo duro no está contento con Alberto, sobre todo porque esperaban tener a todos los “cumpas” libres apenas asumieran, y ya vamos más de un año de gobierno y los que salieron de la cárcel por beneficios de la pandemia, ahora están volviendo. Y el presidente no hace los gestos que espera el cristinismo para que esto no ocurra, más bien, pareciera dejar la decisión en manos de los jueces, y eso enloquece al núcleo duro del Instituto Patria.

La estrategia de colocar a los detenidos como “presos políticos” no estaría dando resultados, e incluso a nivel social ha generado repudio, no sólo en la oposición, sino en buena parte del peronismo no k. El miedo que persigue a los cristinistas duros es que las causas siguen avanzando, y temen que en pleno gobierno nac&pop la llamen a declarar a Cristina, y ahí si se pudre todo, porque es algo que no están dispuestos a tolerar, y difícilmente se lo perdonen a Alberto.

Por ahora se cruzan amenazas, y la interna se mantiene en un grado de “guerra de posiciones” entre los enjuiciados y quienes los apoyan y entre los Albertistas y el propio presidente. Hay que ver cual es la capacidad del actual mandatario para manejarse entre las necesidades de la agenda del kirchnerismo más duro y las necesidades de la agenda gubernamental, que debería empezar a apuntar a resolver los problemas de la gente, sino, los reclamos van a empezar a crecer por todos los frentes.