El gobierno británico se someterá a una investigación independiente para evaluar su manejo de la pandemia
Así lo afirmó el Primer Ministro, Boris Johnson, quien manifestó que el Estado tiene que evaluar sus acciones con la mayor rigurosidad y franqueza posibles.
Con 127.000 muertos a sus espaldas, Gran Bretaña es donde el Coronavirus golpeó más fuerte en el viejo continente. Por este motivo, Boris Johnson anunció que investigarán a su gobierno para conocer como fue el manejo de la pandemia.
El anuncio fue comunicado en la Cámara de los Comunes. Allí el Primer Ministro declaró: “El Estado tiene la obligación de evaluar sus acciones con la mayor rigurosidad y franqueza posibles. Este proceso pondrá las acciones del Estado bajo el microscopio”. Johnson insistió en la investigación deben analizar los acontecimientos del año pasado e identificar las falencias, cuyo arreglo marcarían diferencias en el futuro.
Para este fin, el gobierno insular liberó a los investigadores todos los documentos disponibles sobre manejo epidemiológico y dio libertad de entrevistar a los actores que crean necesarios. Según estiman, la investigación empieza en septiembre de 2022 y también incluirá a Gales, Escocia e Irlanda de Norte, que tienen plena autonomía en materia sanitaria.
Aunque en Europa ahora atraviesan el verano, el descenso de las temperaturas podría incluir una suba en los contagios, afirman los expertos. Por este motivo fue criticada la fecha de inicio, sobretodo por el líder de la oposición laborista, Keir Starmer, quien sostuvo que la investigación debe comenzar inmediatamente.
Los motivos de la investigación
Según los críticos y la oposición, el Gobierno británico desoyó a la comunidad científica e ignoró la experiencia de otros países respecto al coronavirus al comienzo de la pandemia. Meses atrás, el mismo Boris Johnson defendió que lo mejor era no contener la infección, para que se haga extensiva a la población y se logre una inmunidad de grupo.
El costo de vidas fue significativo, y apuntan como culpable al Gobierno. Durante la primer ola, su estrategia se basó en retrasar las medidas que la comunidad científica proponía a sus vecinos europeos. Sin embargo, en la segunda ola la cuarentena que atravesaron en Gran Bretaña fue de las más estrictas en el mundo, logrando bajar los casos.
