EL NEGACIONISMO Y LA ILEGALIDAD EN LA UNVIME
Así titularon la situación actual de la universidad el Rector y Vicerrector electos, que, a 17 días de que asuman a sus cargos, no sólo no pueden tener una transición de mando transparente, si no que también se encuentran con la noticia de que pusieron en planta permanente a actuales funcionarios de la institución.
En el comunicado, expresan:
Restando 17 días hábiles para que las nuevas autoridades electas asuman, por los medios nos hemos enterado que la actual gestión encabezada por David Rivarola y Graciela Balanza, habrían incorporado de forma intempestiva en planta permanente de Nodocentes a personal político (actuales funcionarios) y a personal contratado. Si eso es así, habrían violado las leyes y convenios colectivos, al no existir concursos, ni contar con los recursos presupuestarios, poniendo en riesgo del pago de los sueldos del resto del personal y tratando de enemistar entre sí a compañeros trabajadores.
David Rivarola y sus funcionarios saben que la UNViMe no cuenta con las partidas presupuestarias para afrontar ese gasto, y mienten al decir al personal que desde el Estado Nacional han asegurado los recursos. Días pasados, en una reunión en el Ministerio de Educación de la Nación, se planteó esta situación y bajo ningún punto de vista se ha dado esa autorización financiera. Si esta maniobra fraudulenta e ilegal prospera, repetimos, se pondría en riesgo el pago de los sueldos de todo el personal docente y nodocente. Eso podría configurar un incumplimiento de los deberes de funcionario público y es delito penal. Mienten también al hacer figurar en las actuaciones administrativas como paritaria algo que nunca existió como tal. Eso podría ser falsedad ideológica, delito penal. Tampoco es el rector quien asigna la planta permanente sino el Consejo Superior. Eso podría ser usurpación de funciones, delito penal.
También habrían expresado que los fondos los va a proveer un banco privado; nos comunicamos con la gerencia central y eso no es verdad. Eso podría tipificar el tráfico de influencias, delito penal.
Rivarola niega la democracia y niega la verdad, niega la legalidad y la transparencia al violentar las normas estatutarias y presupuestarias, los convenios colectivos y la sana convivencia. La dilación en recibirnos en audiencia tuvo un único objetivo: ganar tiempo para tapar sus ilegalidades y hacer el mayor daño posible a la próxima gestión. Pero ya hay una auditoría en marcha y peritos en la materia trabajando para hacer relucir la verdad.
Sepan que, de ser responsables, los vamos a denunciar penal, administrativa y académicamente, pues, aunque el rector saliente regrese a la universidad de origen, muchos de sus colaboradores son docentes de la UNViMe y es una pena que el próximo exrrector en su negacionismo sobre la expresión democrática del 16 de agosto, los quiera empujar a la ilegalidad.
Por eso, hoy más que nunca: UNViMe libre y transparente.
